Deportes. Martes, 14 de Julio de 2020
Luego de ser seleccionado y no participar en el Juego de Estrellas de una temporada antes, Pedro Martínez abrió su único clásico de media temporada el 13 de julio de 1999, y lo hizo ante su público estableciendo un récord nunca antes visto en 69 clásicos de media temporada previos.
El lanzador derecho de 27 años de edad en ese entonces, arrancó el partido 70 de media temporada con cuatro ponches consecutivos, para ser el primero en la historia en conseguirlo desde que se jugó el primero en 1933 –en 20 Juegos de Estrellas más desde 2000, ningún otro pitcher ha podido igualar la hazaña.
El dominicano subió a la loma de Fenway Park como el abridor de la Liga Americana vistiendo el uniforme de los locales Boston Red Sox, para enfrentar a la Liga Nacional.
Al primer bateador del juego lo llevó a ocho pitcheos y en los siguientes dos necesitó de nueve para sacar la entrada con tres ponches, en cuentas de bolas y strikes de 2-2, 1-2 y 2-2. Con el primer bateador de la segunda entrada necesitó cuatro pitcheos –cuenta 1-2– para establecer la marca.
El lanzador derecho había participado en dos Juegos de Estrellas anteriores –1996 y 1997– como relevo, pero representando a la Liga Nacional como jugador de los Montreal Expos.
En 1998, en su primer año con los Red Sox, fue seleccionado para el Juego de Estrellas en Coors Field, pero no vio acción. Después de 1999, fue electo a otros cuatro Juegos de Estrellas y tampoco subió a la loma.
En tres participaciones en el Juego de Estrellas, el inmortal del Salón de la Fama de Cooperstown, ponchó a ocho jugadores en total y no toleró carrera en cuatro entradas lanzadas, en que aceptó par de hits y no otorgó bases por bolas.
¿A quiénes ponchó al hilo Pedro Martínez en el All Star de 1999?
Barry Larkin: Llegó al Juego de Estrellas con 31 ponches en 356 apariciones en el plato, así como 97 hits. Terminó su carrera con 2,340 hits en 2,180 juegos jugados en 19 campañas con Cincinnati Reds, pegando 198 jonrones. Se ponchó 817 veces en 9,057 apariciones en el plato. En 2012 fue electo al Salón de la Fama de Cooperstown.