Deportes. Domingo, 02 de Febrero de 2025
DALLAS – Algo que comenzó como especulación y rumor se convirtió en la peor pesadilla de los aficionados al deporte en el área Dallas-Fort Worth, el canje de Luka Doncic a Los Angeles Lakers, el sábado casi a medianoche.
Hay cualquier cantidad de hipótesis y teorías sobre la salida de Doncic, que van desde la falta de preparación física con que las pretemporadas más recientes reportó con los Dallas Mavericks hasta el aspecto económico, ya que al término de la actual campaña será elegible para contrato con salario máximo de veterano NBA.
En medio están las lesiones, de las que algunas pueden ser provocadas por su peso, acondicionamiento físico, disciplina en procesos de rehabilitación, etcétera, así como la relación con compañeros, equipo, medios de comunicación y hasta el nuevo grupo propietario de los Mavericks.
Pero nadie puede negar su valor dentro de la duela; la clase de jugador que lo convirtió en la figura más importante de los Mavericks desde Dirk Nowitzki y el de mayor perfil entre todos los equipos profesionales de Dallas-Fort Worth; una región donde el deporte en general es casi una religión.
Tampoco nadie podrá negar que Doncic llevó a los Mavericks a otro nivel, incluyendo las Finales de la NBA más recientes. Cuando el jugador esloveno jugó su último partido con el jersey de Dallas, el 25 de diciembre pasado, era el principal candidato a Jugador Más Valioso de la NBA.
Además, habrá que sumarle el valor de Doncic como la cara de la franquicia fuera de la duela a nivel mundial en aspectos de mercadotecnia, patrocinios, reconocimiento de la marca Mavericks, comercialización, derechos de transmisión… en lo que jamás ningún otro basquetbolista del equipo había provocado, ni el Salón de la Fama Dirk Nowitzki en sus mejores momentos…