Internacional. Lunes, 28 de Marzo, 2022
Tegucigalpa.- El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, se declaró «inocente» de los cargos que le imputa Estados Unidos, a quien se le acusa de estar vinculado al narcotráfico y uso de armas.
La declaración fue dada a conocer mediante una carta escrita desde la cárcel por el exmandatario hondureño, la cual fue publicada por su esposa, Ana García, en Tegucigalpa, antes de que el pleno de la Corte Suprema de Justicia se reúna hoy lunes en la capital hondureña para decidir si ratifica, modifica o revoca la extradición del exgobernante que, el pasado día 16, autorizó un juez natural que conoció sobre el arresto preventivo con fines de extradición que solicitó EE.UU. el 14 de febrero.
En la misiva Orlando Hernández apuntó que confía en la justicia y predice que podría ser condenado a tres cadenas perpetuas y convertirse «en un muerto en vida».
De acuerdo con Hernández, él ha sido víctima de una conspiración y de una campaña de odio y desinformación, y es «evidente» que «las contradicciones de los delincuentes (narcotraficantes hondureños que enfrentan juicios en Estados Unidos), juicio tras juicio, mienten y se contradicen».
«Soy inocente, soy víctima de una venganza y una conspiración. Estoy seguro que Dios me hará justicia», señaló.
Del mismo modo, el imputado sostuvo que «es muy doloroso lo que estoy viviendo. Es muy duro estar separado de mi familia, mis seres queridos, privado de tantas cosas. Cuando pienso en mis nietas Violeta y Olivia se viene a mi mente la posibilidad de no verlas nunca más, que no podré entregar a mis menores hijas Daniela e Isabela cuando decidan casarse, que no podré ver Honduras y su gente».
Lamentó que por estar detenido, en una unidad especial de la Policía Nacional, desde el 15 de febrero, cuando fue capturado en su residencia, no pudo asistir al sepelio de su abuela materna, ni expresarle sus condolencias a su madre, Elvira Alvarado.
«Nunca creí que esta lucha por la paz de nosotros los hondureños me llevaría a convertirme en un privado de libertad. Nunca creí que la respuesta a muchos años dedicados al trabajo por la seguridad nos llevarían a ser calificados como narcoestado. Sabía que esta lucha no sería fácil, tendría muchos riesgos», indicó el expresidente.