Internacional. Viernes, 29 de Septiembre, 2023
DIARIO ECO/PUERTO PRINCIPE, HAITÍ.- Varios grupos armados se enfrentan desde hace 2 días en varios barrios de la región metropolitana. La ejecución de Tyson, como era conocido, líder de la banda Carrefour Vincent y Drouillard, encendió la pólvora. La coalición del G9 está al borde de la explosión. Entre el miércoles y el jueves se escucharon disparos esporádicos en Cité Soleil, el bajo Delmas, La Saline, Bicentenaire y otras zonas del centro de Puerto Príncipe, de acuerdo al periódico haitiano, Le Novelliste
«Bandidos de Tokio y La Saline atacan a Jimmy Chérisier a quien acusan de haber ordenado la ejecución de Tyson. Jimmy Chérisier puede contar con el apoyo de Mikanò, Mathias e Iscard”, explicó una fuente a Nouvelliste.
Al norte de Puerto Príncipe, en la llanura de Cul-de-Sac, llovieron balas sobre los barrios de Bon Repos, Lilavois, Lizon, etc. Miembros de la pandilla Canaan realizaron una incursión en esta zona controlada por el líder de la pandilla llamado «Chen Mechan». «Quieren la cabeza de Chen Mechan. Sólo juran por su ejecución», explicó otra fuente a Nouvelliste.
Las actividades de este sector se mantuvieron paralizadas durante la jornada del jueves 28 de septiembre. El periódico se enteró de que se enviaron agentes de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden -UDMO- para asegurar la sub comisaría de policía de Bon Repos y detener el avance de los matones.
Por el momento, es difícil hacer un balance de los enfrentamientos. Las organizaciones de derechos humanos contactadas por Le Nouvelliste aún no pueden acceder a los barrios afectados por los conflictos. Estos enfrentamientos se producen menos de una semana después de la publicación de una declaración conjunta de varios líderes de pandillas anunciando que habían acordado hacer las paces y habían formado la coalición denominada “Vivir Juntos”. Estos patrones también aseguraron a la población que nunca más serían atacadas.
Cuando se le pidió que comentara este anuncio, el Primer Ministro Ariel Henry, durante una conferencia de prensa en el aeropuerto internacional Toussaint Louverture, afirmó que los bandidos nunca serán agentes de paz. Según él, corresponde a la policía ponerlos a salvo para restablecer la calma en el país. “[Joumou pa donnen kalbas, gang pa nan viv ansanm]. Las pandillas no son pacificadoras. Las bandas armadas son sinónimo de discordia y división. Quienes los apoyan no pueden hacer proyectos sociales para el país”, afirmó.
«Los actos más recientes de los bandidos en Carrefour-Feuilles y Saut-d’Eau muestran claramente que los bandidos siguen siendo bandidos y que son criminales y asesinos», prosiguió.