Nacionales. Viernes, 30 de Agosto de 2024
DIARIO ECO/SANTO DOMINGO, RD.- El Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, reaccionó tajantemente al comunicado de Amnistía Internacional, que pidió a la República Dominicana que cese su «política migratoria racista».
Esta no es la primera vez que el referido organismo internacional dice que en RD predomina el sistema de racismo, lo que ha generado avalancha de críticas por parte de los dominicanos, quienes manifiestan que la nación ha sido bastante solidario con el pueblo haitiano.
Comunicado íntegro:
Nuestro país ha demostrado, a lo largo de su historia, su capacidad para enfrentar desafíos y avanzar en la construcción de una sociedad más justa y digna para todos los seres humanos, siempre en el marco del respeto a nuestra Constitución y a las instituciones que nos rigen.
Las observaciones realizadas por Amnistía Internacional no reflejan con precisión los esfuerzos y logros que hemos alcanzado como nación.
Si bien reconocemos que aún existen áreas de mejora, es fundamental destacar que nuestro compromiso con los derechos fundamentales no es negociable.
Estamos trabajando de manera constante para fortalecer nuestras instituciones, promover la transparencia y garantizar que los derechos de todos los dominicanos y dominicanas
sean plenamente respetados.
La República Dominicana es un país soberano, con una profunda convicción en el respeto a la dignidad humana y a su Constitución. Seguiremos trabajando para garantizar un futuro en el que todos puedan vivir con dignidad y seguridad, bajo un Estado que respete y defienda los derechos de sus ciudadanos.
El Defensor del Pueblo de la República Dominicana invita a que cualquier caso concreto sea presentado de manera formal, y garantizo que recibirá una respuesta responsable, coherente con los principios que han caracterizado la vida y el compromiso con la justicia y la equidad, de su titular y el equipo que conforma este órgano constitucional.
Nuestra prioridad es y siempre será el bienestar de nuestro pueblo, actuando en defensa de los derechos y bajo el respeto a nuestra Constitución y nuestras instituciones. En esa dirección continuaremos, sin aceptar presiones o valoraciones externas que no reconozcan nuestra realidad y nuestro progreso. La defensa de los derechos humanos en nuestro país es, y seguirá siendo, una responsabilidad asumida con seriedad y compromiso, basada en el respeto mutuo y la soberanía nacional.