La funcionaria explicó que el Sistema Nacional de Atención a la Violencia contra la Mujer cuenta con las herramientas necesarias para prevenir la ocurrencia de feminicidios o agravamiento de la situación de violencia, cuando ya ha habido denuncias previas, pero que sin embargo una falla en el eslabón de la cadena del sistema de justicia puede provocar hechos tan lamentables y dolorosos como el feminicidio de la comunicadora, Chantal Jiménez, por lo que es imperativo profundizar dicha investigación”.
Asimismo, la ministra insistió en que lo ocurrido debe tener una explicación pública “porque es necesario que las mujeres se sientan seguras y confiadas en las instituciones al denunciar los hechos de violencia en su contra”.
Destacó que desde el Ministerio de la Mujer se hacen grandes esfuerzos en el trabajo de prevención, sensibilización, información y atención integral para que las mujeres denuncien la violencia y para mantener operando la Línea de Emergencia *212 y las Casas de Acogida las 24 horas, los siete días de la semana, pero se requiere que todas las instituciones que intervienen en las diferentes fases del sistema, cumplan con su trabajo en estricto apego al marco normativo y regulatorio.
«Cada feminicidio, cada vida que es arrebatada por la violencia machista, es una pérdida irreparable, para las familias, para las comunidades y para nuestra sociedad», agregó.
Sostuvo que erradicar la violencia machista es una labor del sistema de protección desde todas sus instituciones, y un compromiso de la sociedad en su conjunto, porque “cada niña, cada adolescente y cada mujer, merece vivir en paz, merece vivir segura, y merece una vida libre de violencias”.
«No podemos devolverle a Chantal Jiménez a su familia y a la sociedad, pero sí asegurar que hechos como este no se repitan y que no queden impune».
Manifestó, que este feminicidio interpela sobre la necesidad de avanzar en la adopción de la Ley Orgánica Integral contra la Violencia hacia la Mujer que cursa en el Congreso y reitera al Ministerio Público su solicitud de investigación, sanción y cumplimiento de los protocolos de actuación ante los casos de violencia de género e intrafamiliar, “porque la vida de las mujeres, que denuncian, depende de ello».