Opinión. Lunes, 28 de Octubre de 2024
La relación entre las decisiones políticas y las de un dirigente de béisbol en medio de una final entre Águila y Licey depende mucho del momento en que se realicen. Por ejemplo, cuando el mánager se tarda más de lo debido en sacar al lanzador, eso puede costarle la victoria en ese juego. Del mismo modo, cuando un político no toma decisiones en el momento oportuno, puede costarle su carrera política.
Después de las elecciones de 2020, en las que el PLD salió del poder con un 35% del electorado, algunos dirigentes del PLD pensaron que Luis Alberto debía aspirar al Comité Político del PLD para sobresalir entre los demás aspirantes al cargo de alcalde, ya que en ese momento el diputado Bolívar Valera (el Boli) daba señales de que podría postularse para la alcaldía de Santo Domingo Este, con el respaldo de los equipos de Cabrera y Alfredo Martínez. Sin embargo, el Boli renunció al PLD, dejándole el camino despejado a Luis Alberto.
Algunos analistas políticos, los de mayor olfato político, pensaron que Luis Alberto iba a aspirar al Comité Político para estar en el organismo donde se toman las decisiones de alianzas y se decide a quién premiar o a quién sacrificar. Sin embargo, Luis Alberto aparentemente se desmotivó de la política y no aspiró al comité político, lo que le trajo consecuencias negativas en su carrera por la alcaldía de Santo Domingo Este. En el momento de hacer alianzas, el PLD no hizo suficiente esfuerzo por ir aliado en Santo Domingo Este en la categoría de alcalde, y mientras Luis Alberto, que tenía excelentes posibilidades de ganar, fue ignorado por el partido, que se alió en el Distrito Nacional alrededor de Domingo Contreras. En la provincia de Santo Domingo decidieron llevar a la senadora como aliada de la Fuerza del Pueblo.
Esa actitud del Partido de la Liberación Dominicana de buscar alianzas para Cristina Lizardo como candidata a senadora es una prueba de que el Comité Político del PLD, al igual que en otros partidos, es una clase que se protege entre sí, mientras que los que están abajo son sacrificados.
Hoy, con un PLD disminuido, producto de unas elecciones presidenciales donde apenas alcanzó un 10%, y con la reelección a presidente de un Danilo Medina debilitado por el rechazo de un tercio de los miembros del Comité Político, nos preguntamos si el mensaje de esperanza, transformación, fortalecimiento y unidad que envía Luis Alberto luego de ser electo miembro del Comité Político del PLD es un mensaje tardío para un pueblo que posiblemente ha dejado de creer en ese partido.
La pregunta obligada en este momento es si ya es muy tarde para ablandar habichuelas o si Luis Alberto llegó al Comité Político en el momento indicado.