Opinión. Viernes, 14 de Noviembre, 2025
El caso reciente de la niña encontrada sin vida en un contenedor de basura ha encendido las alarmas sobre un tema que merece mayor atención: el uso y manejo de los contenedores de basura en Santo Domingo Este y sus posibles implicaciones en la seguridad ciudadana.
Aunque el Ayuntamiento de Santo Domingo Este ha defendido la instalación de estos contenedores como una medida moderna y eficiente para mantener la limpieza y el orden en las vías públicas, se ha pasado por alto un aspecto esencial: la falta de supervisión y control puede convertirlos en un riesgo para la comunidad.
Estos contenedores, que muchas veces se ubican en espacios reducidos o cercanos a vías principales, pueden ser utilizados para ocultar objetos peligrosos o incluso personas, sin que nadie lo note. Y una vez los camiones recolectores trasladan los desechos al vertedero, se pierde toda posibilidad de rastrear el origen de lo depositado, lo que dificulta las investigaciones en casos criminales o desapariciones.
Además, la mala ubicación de algunos contenedores limita carriles y provoca taponamientos en horas de alto tránsito, afectando la movilidad y aumentando el riesgo de accidentes.
El llamado es claro: las autoridades municipales deben revisar la colocación, supervisión y protocolo de manejo de los contenedores de basura, integrando la seguridad ciudadana en sus políticas de gestión urbana. La modernización del sistema de limpieza debe ir de la mano con la protección de la vida y la tranquilidad de los habitantes de Santo Domingo Este.