Política. Jueves, 19 de Septiembre, 2024

DIARIO ECO/SANTO DOMINGO, RD.- El dirigente del Partido de la Liberación Dominicana -PLD-, Francisco Domínguez Brito, consideró este jueves que las reformas planteadas por el Gobierno carecen de sentido, ya que las mismas no plantean transformaciones relevantes.

«Uno no sabe si llamarlo reforma o retorica, porque tú tienes la reforma constitucional supuesta, ahí no hay nada de fondo, ahí no hay nada de contenido, ahí no hay una verdadera propuesta para reforma del sector justicia, ni en la judicatura, ni siquiera el Ministerio Público y mucho menos en esa reforma constitucional hay alguna propuesta para formular por ejemplo, el Poder Municipal, o por ejemplo, dar una categoría más importante al Medio Ambiente, que los seres sintientes sean sujetos de derechos, que entremos a las nuevas propuestas que el mundo discute sobre la protección a la naturaleza», dijo el ex procurador de la República  durante una entrevista en el programa El Despertador.

Asimismo, el exministro de Trabajo considera que «la reforma laboral igual es pura retorica, ahí ponen un día de vacaciones demás, uno de menos, cuestiones sencillas, pero no se aborda los temas más importante como; el salario, seguro de desempleo, vs cesantía, estudios actuariales para determinar cual es la situación, no hay estudios para determinar que piensa el trabajador sobre las propuestas que hay, y las propuestas son simplemente cosméticas, incluso la mayoría de los casos que suceden en materia laboral, son demandas en prestaciones laborales, son conflictos individuales, no colectivos de trabajo, donde son pequeñas pequeñas y medianas empresas…. no son las grandes empresas que van a los tribunales».

Continua no se aborda correctamente el tema e proteger a las medianas empresas, «no se aborda ni remotamente el tema de la conciliación como debería abordarse… es decir que , si tu coges la reforma constitucional, no tiene ningún sentido, si busca la reforma laboral, no aborda absolutamente nada, las ultimas propuestas fueron todavía más espeluznantes».

Por Aridia Montero