Política. Martes, 02 de Diciembre, 2025
DIARIO ECO/SANTO DOMINGO, RD.- El periodista Jaime Rincón expresó sentir “vergüenza” por lo que presenció durante la marcha de la Fuerza del Pueblo. Afirmó que un grupo de “retrógradas”, de esos “dinosaurios” o “cocodrilos andinos” que organizaban la actividad, se confabularon y ordenaron no permitir que Omar Fernández subiera a la tarima.
Rincón destacó que Omar Fernández es hijo de Leonel Fernández, presidente y fundador de la organización política, además de su figura principal y, a la vez, senador del Distrito Nacional, donde se realizó la manifestación.
El comunicador cuestionó severamente a los organizadores, preguntando: “¿Qué diablo están pensando los organizadores de esa manifestación, señores?”. Calificó la situación como “una locura” y señaló que, si eso se lo hacen a Omar Fernández, no quiere imaginar lo que podrían hacerles a otros.
Explicó que Omar solo logró subir a la tarima porque Leonel Fernández miró y preguntó: “¿Y dónde está Omar?” justo antes de iniciar su discurso. Consideró que intentar dejarlo abajo fue una falta de respeto, una falta de consideración, un acto de mezquindad y una muestra de falta de tacto político. El comunicador de El Nuevo Diario argumentó que esto evidencia una falta de entendimiento sobre “los tiempos que estamos viviendo y la figura que es Omar Fernández”.
En cuanto a su experiencia con encuestas, Jaime Rincón se identificó como “el único joven comunicador que ve encuestas reales cada 15 días de trabajo”. Aclaró que no se trata de encuestas publicadas, sino de estudios internos, realizados por personas no vinculadas a la política, para monitorear la situación en distintas demarcaciones del país.
Rincón recordó que en la campaña anterior no se equivocó en ninguno de sus pronósticos. Afirmó que “todo lo que yo dije en el país entero que iba a ganar, ganó, de todos los partidos”, y que esa información está disponible en sus redes sociales, donde se pueden verificar los tweets. Jaime Rincón concluyó que el manejo de la situación de Omar Fernández fue “una locura”.