Política. Miercoles, 01 de Octubre, 2025
DIARIO ECO/SANTO DOMINGO, RD.- El presidente de la Fuerza del Pueblo (FP) en el Distrito Nacional, Rafael Paz, se abalanzó contra el Partido Revolucionario Moderno (PRM) diciento que su «ineptitud» no solo ha llevado al país a fracaso, sino que ahora buscan empañar el ambiente político.
Su reacción surge luego de que un hombre, supuestamente miembro del partido oficialista, acudió a una evento político de la FP en Providence y causó problemas. Paz responzabilizó al PRM de haber enviado al señor para que dañe la actividad.
Ante esto, cuestionó «¿hasta dónde piensan llegar?. Las declaraciones la hizo en un artículo de opinión divulgado en sus redes sociales.
«El PRM no solo ha descarrilado al país con su ineptitud y su incapacidad para gobernar, sino que ahora pretende enturbiar el ambiente político enviando “espalderos” a provocar actos de violencia contra el líder de la oposición. ¿Hasta dónde piensan llegar?», manifestó.
Artículo de opinión íntegro
EL PRM Y LA VIOLENCIA: SERVIDORES DEL PASADO EN COPA NUEVA
Por: Rafael Paz
El PRM no solo ha descarrilado al país con su ineptitud y su incapacidad para gobernar, sino que ahora pretende enturbiar el ambiente político enviando “espalderos” a provocar actos de violencia contra el líder de la oposición. ¿Hasta dónde piensan llegar?
No nos callarán ni nos intimidarán. Con valentía asumimos la tarea patriótica de recuperar la nación. Vamos de frente, sin miedo, respondiendo con más fuerza, más crítica a lo mal hecho y un compromiso redoblado con las causas del pueblo.
Desesperados por los escándalos y el caos que ellos mismos han generado, saben que han perdido el favor popular. Las juramentaciones masivas en la Fuerza del Pueblo y el éxito rotundo de las actividades de Leonel Fernández en los Estados Unidos los tienen fuera de control. Han optado por la bajeza y el atropello, y lo que viene en los próximos meses será aún peor.
Están moral y políticamente deteriorados. Ya no pueden ocultar su verdadero rostro. Su ambición de seguir despilfarrando el presupuesto y disfrutando de los privilegios del poder no tiene límites. Una vez más nos recuerdan que, en su afán de mantenerse en el poder, carecen de escrúpulos —igual que lo hicieron en el 86 y en el 2004.
El PPH-PRM se revela como lo que siempre ha sido: el disfraz de lo viejo en envase nuevo. No representan lo moderno ni lo diferente; son simplemente servidores del pasado en copa nueva.
¡SE VAN!