Salud. Viernes, 24 de Julio, 2020
Brasil se ha convertido en el escenario perfecto para los ensayos clínicos de vacunas, en la carrera mundial y a contrarreloj para alcanzar la que consiga frenar la pandemia del coronavirus.
El virus ya ha dejado más de 15,5 millones de contagiados y 634.405 fallecidos a nivel mundial. Solo en Brasil son 2.287.475 las personas contagiadas y 84.082 las muertas, lo que le sitúa en el segundo país con más cifras de infectados y decesos, por detrás de EE.UU.
«Brasil se ha vuelto atrativo por el número de casos que se están produciendo. Es importante que los ensayos se realicen en esos lugares donde existe una alta transmisión. Los participantes son voluntarios y profesionales de salud, porque tienen un mayor riesgo de infección al estar expuestos en sus ambientes de trabajo«, explica a RT Julival Ribeiro, infectólogo y director general del Hospital de Base de Brasilia.
Desde esta semana, ya son tres los ensayos clínicos que se desarrollan en el gigante latinoamericano. En junio empezaron los estudios de la vacuna ChAdOx1 en fase tres, última etapa antes de que sea homologada, de la Universidad de Oxford y el gigante farmacéutico AstraZeneca.
El martes pasado, se iniciaron las pruebas de la vacuna china Coronavac, también en fase tres, gracias a un convenio entre el laboratorio chino Sinovac Biotech y el Instituto brasileño Butantan.
«Estoy muy contenta de poder participar de esta experiencia, estamos viviendo un momento único e histórico y eso fue lo que me hizo querer formar parte de este momento», dijo la primera doctora en recibir la vacuna. Seguir la historia en RT