Opinión. Miercoles, 15 de Enero de 2025
El día 20 del mes de diciembre del año 2024, en una importante plaza comercial de Santo Domingo Este, me encontré con un dirigente político con el que tengo durante más de 7 años una relación de amistad, es un importante dirigente del Partido Revolucionario Moderno.
Me sorprendió verlo comprando algunas golosinas, manzanas, arroz, habichuelas, aceite y otros comestibles que son parte de la época navideña.
Como él actualmente no está ocupando ninguna posición de dirección en el estado ni ostenta la curul de diputado, le pregunté las razones de tal acto de solidaridad, el cual es propio de funcionarios, diputados, alcalde o regidores.
Su respuesta fue la siguiente, «La solidaridad no depende de la posición que se ocupa, es un acto de sacrificio y desprendimiento hacia el que lo necesita»
Luego agregó de manera textual:
«No necesito ser diputado o tener una dirección para ir en auxilio de mi gente»
Sinceramente me sorprendió esa respuesta.
A partir de ese día aumentó el aprecio y la admiración hacia el ex diputado Carlos De Jesús.
Ese encuentro me permitió reflexionar sobre otras cualidades de Carlos De Jesús que son poco comunes en los políticos de hoy en día.
Todo indica que hay esperanza en gran parte de la juventud que ha incursionado en la política, especialmente de jóvenes de la nueva camada de Santo Domingo Este.
Gran cantidad de miembros del PRM, creyeron que la reacción de Carlos De Jesús sería diferente cuando le fue arrebatada la candidatura a diputado. Pensaban que actuaría con inmadurez política, algo propio en todo joven.
Se quedaron esperando los improperios, ataques a su partido, ir a medios de comunicación a protestar o al Tribunal Superior Electoral, impugnar el proceso o en un caso más extremo tomar el camino que muchos han recorrido, abandonar el partido y buscar la candidatura por otra institución política.
Lo que haría Carlos de Jesús era el tema de conversación en las reuniones de Perremeistas de la circunscripción No.2 y de otros partidos.
Reconozco estar en ese grupo que esperaba su reacción. ¡Esperaba lo peor!
Contrario a todo pronóstico, se quedó en su partido, se entregó a la campaña municipal y obtuvo un triunfo contundente como coordinador del candidato a la Alcaldía por el PRM en la circunscripción No.2
Demostró tener condiciones que no tienen muchos dirigentes de más tiempo y más edad.
La actitud asumida por Carlos De Jesús es una muestra clara y fehaciente de que goza de inteligencia emocional, más que muchos políticos de su propio partido que todavía a estas alturas estuvieran haciendo rabietas y bembitas o simplemente se hubieran marchado.
Como bien dice la biblia, «El oro se prueba en el fuego»
Y fue justamente eso, una prueba de fuego la que recibió este joven ex diputado. En febrero 2024 y en mayo, tuvo que superar ser despojado de la candidatura a diputado por un allegado de otro partido, pero pronto se reintegró, asumió el compromiso con la alcaldía y luego con más fe la candidatura presidencial de Luis Abinader.
Eso demuestra madurez política, inteligencia emocional, formación profesional y sobre todo lealtad a su partido.
Carlos De Jesús tiene muchas cosas que enseñarles a quienes practican la vieja política.
Aunque no estoy en su partido, reconocer las extraordinarias condiciones de los amigos es un acto de justicia.
Le espera un futuro brillante a quien actúa de esa manera.