Opinión. Martes, 22 de Octubre de 2024
El uso de la luz centella por parte de la policía es una herramienta clave para señalizar presencia y garantizar la seguridad en situaciones de emergencia o intervenciones rápidas. Sin embargo, en la República Dominicana, se ha vuelto cada vez más común ver vehículos policiales con las luces centella encendidas de forma permanente, lo que genera serias preocupaciones sobre la efectividad de su uso y el impacto que tiene en la lucha contra la delincuencia.
En un contexto donde la delincuencia organizada y los crímenes callejeros han aumentado, la visibilidad de las fuerzas del orden puede ser tanto un recurso como un arma de doble filo. El uso constante e indiscriminado de la luz centella, que en principio busca disuadir el crimen, termina generando un efecto adverso: alerta a los delincuentes y les permite modificar su comportamiento antes de que se inicie cualquier tipo de intervención policial. Al hacer notar su presencia.
